martes, 13 de mayo de 2014

VALORES ETNOLÓGICOS


          En la década de los cincuenta del siglo pasado, en Menorca era todavía frecuente la extracción de aguas freáticas con métodos medievales. En los años sesenta del mismo siglo cayeron en desuso la mayoría de ellos. Actualmente están en estado lamentable, algo parecido al coma profundo en los humanos. No tenemos ocasión, ni menorquines ni visitantes, de admirar el funcionamiento de esos bellos elementos etnológicos de antaño.
¿Por qué no recuperamos algunos? Por ejemplo: uno en cada término municipal. Una vez restaurados, podrían turnarse para trabajar con ellos unos días y horas determinados. Sería agradable poder revivir estas imágenes para quienes tuvieron ocasión presenciarlas. Asimismo para las nuevas generaciones podrían tener una idea clara y palpable del tiempo de sus abuelos.
Sería un aliciente para los turistas que, sin dejar de ir a la playa, podrían fácilmente visitar la reliquia etnológica que les pillara más cerca. Durante la temporada baja para el turismo, habría crecido el abanico de posibilidades para motivar a los de fuera y los de dentro a conocer y admirar nuestro rico patrimonio cultural.
Ahora veamos de forma somera como son y funcionan.

 

Pozo de torno
Los pozos de torno son una reliquia de los musulmanes. Tienen dos pozales colocados uno a cada extremo de una maroma enrollada a un rodillo vertical. Este rodillo se hace girar con la fuerza de una bestia. Con este giro, se enrosca la maroma por un extremo y desenrosca por el otro. Así se consigue que un pozal suba lleno y el otro baje vacío. Ambos llegan simultáneamente a su destino. El de arriba es vaciado por una persona, al mismo tiempo que el de abajo se llena por sí solo en las aguas freáticas del fondo del pozo.


 A continuación se hace girar el rodillo en sentido contrario y el pozal de arriba baja para llenarse y el de abajo sube para ser vaciado. Esta forma de elevación de agua es específica de Menorca.





Pozo de tambor
Este sistema es una variación del pozo de torno. Tiene el rodillo o tambor horizontal. Lo mueve un hombre haciendo rodar un volante mediante una manivela. Los pozales suelen ser más pequeños que en el pozo de torno.




Noria
Las norias son originarias del Oriente Medio, fueron introducidas en Menorca por los moros. Se utilizaron principalmente en los regadíos. Para extraer las aguas subterráneas, se enganchaba una bestia en una guía la cual estaba unida a una percha y ésta a una pieza vertical denominada árbol. Este árbol ensamblado a un rodillo que giraba horizontalmente acoplándose con otro rodillo que giraba de forma vertical. Sobre este último gravitaban dos cadenas sin fin y a éstas iban sujetos unos cangilones.
El animal de tiro daba vueltas sobre una muela (pequeña elevación artificial) haciendo mover todo el sistema. A diferencia del pozo de torno, siempre daba vueltas en el mismo sentido. Llevaba normalmente unas anteojeras para que no se mareara y no se detuviera con alguna distracción. Con este movimiento, las cadenas con los cangilones por una parte bajaban vacíos bocabajo hasta el fondo del pozo; se llenaban de agua y subían bocarriba por el otro lado. Al llegar a lo más alto y ponerse horizontales se derramaba el agua en una artesilla y desde ésta pasaba una  alberca.


Los cangilones tenían un pequeño taladro en la parte baja para evitar que al llenarse cogiesen  aire y también para que se descargaran al parar. Las norias tenían una pieza que la trababa para evitar que, al detenerse, con el peso del agua, girara hacia atrás. 
Con lo expuesto más arriba he intentado poner mi grano de arena para concienciar a los menorquines en general y a quienes tengan capacidad de poner remedio en particular. Una vez resucitados algunos de estos artilugios medievales, se habría puesto  en valor  y dado más vida a nuestra querida roqueta.  

Marcos Seguí Pons
                                                                                                                                                                      

2 comentarios:

  1. Un article molt interessant. És una llàstima que a molts de llocs on n'hi havia s'hagin acabat destruïnt. Seria interessant que es restauréssin, encara que no s'utilitzin, ja que formen part de la història dels nostres avant-passats.

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    1. Moltes gràcies per es teu comentari i per posar-lo d'una manera d'una manera més favorable que es meus mereixements.

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